miércoles, 31 de julio de 2013

La FDA detecta esteroides anabólicos en unas vitaminas

El ritmo de vida actual lleva a muchas personas a tomar suplementos vitamínicos, pero hay que tener cuidado a la hora de elegir las vitaminas que tomamos. En Estados Unidos la autoridad del Medicamento (FDA) ha informado de que algunos suplementos de vitaminas, sólo se habla de una marca de suplementos, contienen esteroides anabólicos que pueden resultar peligrosos para la salud. Según alertan desde la FDA, estudios preliminares han demostrado que el producto de vitamina B, Healthy Life Chemistry By Purity First B-50, contiene metildrostanolona, una sustancia controlada, y dimethazine. Howard Sklamberg, miembro de la FDA, ha advertido que “Productos que son comercializados como vitaminas pero que contienen esteroides no revelados representan una verdadera amenaza para los consumidores y son ilegales”. Todo surgió porque la FDA recibió 29 reacciones adversas, de distinta gravedad, relacionadas con el uso de vitamina B, Healthy Life Chemistry By Purity First B-50, las reacciones adversas que declaraban los consumidores iban desde la fatiga, al dolor muscular y los calambres, pasando por problemas más serios como daños en el hígado y en la tiroides. Además algunas mujeres también alertaron de complicaciones menstruales y crecimiento del vello corporal. Aunque es un producto estadounidense estas vitaminas se pueden comprar a través de Internet por lo que es posible que haya usuarios de estas vitaminas en otros países, en caso de que alguien tome este complejo vitamínico y observe cualquier síntoma extraño debería informar a su médico. http://farmacovigilancia.tv/blog/la-fda-detecta-esteroides-anabolicos-en-unas-vitaminas/

Medicamentos para la enfermedad de Alzheimer beneficiosos para patologías cardiovasculares

Fármacos utilizados para tratar la enfermedad de Alzheimer (EA) en la etapa inicial podrían reducir el riesgo de ataque cardíaco y muerte, según un estudio publicado en European Heart Journal. El estudio se centra en inhibidores de la colinesterasa (IChE) como el donepecilo, la galantamina y la rivastigmina. Los investigadores estudiaron a 7.073 pacientes con EA, con una edad media de 79 años, durante un seguimiento medio de 503 días. Quienes tomaban IChE tenían un riesgo un 38% más bajo de ataque cardíaco, un 26% inferior de fallecimiento por causas cardiovasculares, como el ictus, y un 36% inferior de muerte por cualquier causa, en comparación con quienes no tomaban esa clase de fármacos. Los pacientes que tomaban las dosis recomendadas más altas de IChE tenían el riesgo más bajo de ataque cardíaco o muerte (65% y 46% inferior, respectivamente) en comparación con quienes nunca tomaban los fármacos. Traducido a cifras absolutas, esto significa que por cada 100.000 personas con EA se producirían 180 ataques cardíacos menos (295 en lugar de 475) y 1.125 fallecimientos menos por todas las causas (2.000 en lugar de 3.125) cada año entre quienes toman IChE en comparación con los que no los utilizan. Los IChE se recetan para ayudar a gestionar los síntomas y ralentizar el avance de la EA en las etapas iniciales y moderadas. Investigaciones anteriores han hallado que estos fármacos ejercen un efecto beneficioso sobre el nervio vago, que controla el ritmo cardíaco, y podrían tener propiedades antiinflamatorias. Nordström P, Religa D, Wimo A, Winblad B, Eriksdotter M. http://www.neurologia.com/sec/RSS/noticias.php?idNoticia=4161

miércoles, 17 de julio de 2013

Un porcentaje significativo de pacientes diagnosticados de depresión padece en realidad trastorno bipolar

Más del 50% de los pacientes con trastorno bipolar no reciben un primer diagnóstico correcto y el 30% de los pacientes jóvenes a los que se diagnostica depresión padece, en realidad, un trastorno bipolar. Entre los trastornos más frecuentes asociados al trastorno bipolar se encuentran, desde el punto de vista psiquiátrico, los trastornos de ansiedad y los trastornos por uso de sustancias, y desde el punto de vista orgánico, el síndrome metabólico y las alteraciones tiroideas. El diagnóstico certero y temprano continúa siendo uno de los principales caballos de batalla en el abordaje de esta patología. El otro gran obstáculo para el control de la enfermedad es la adhesión terapéutica, ya que la mitad de los pacientes incumple el tratamiento prescrito. Hasta un tercio de los pacientes puede mantenerse sin recaídas durante largos períodos, pero un 5-10% presenta recaídas frecuentes. El tratamiento del trastorno bipolar se basa en la combinación de tratamiento farmacológico y la psicoeducación. Con ello, el paciente se asegura poder mantener su nivel de funcionamiento (social, laboral, etc.) con normalidad, evitando las recaídas y sus consecuencias como la hospitalización, el riesgo de suicidio, la cronificación de la enfermedad o la aparición de déficit cognitivo. Torrent C, Del Mar Bonnin C, Martínez-Arán A, Valle J, Amann BL, González-Pinto A, et al. http://www.neurologia.com/sec/RSS/noticias.php?idNoticia=4134