jueves, 23 de febrero de 2012

Daclatasvir en el tratamiento de la Hepatitis C

En el mundo hay unos 170 millones de afectados de hepatitis C crónica, por lo que su abordaje supone un gran reto. "Para poder hablar de curación de la hepatitis C, debemos controlarla en Asia, donde se concentran la mayor parte de los afectados; así acabaremos con la epidemia", ha dicho Jacob George, profesor de Gastroenterología de la Universidad de Sidney, en Australia, que ha participado en la XXII Conferencia de la Asociación Asia Pacífico para el Estudio del Hígado, en Taipei.
Existen seis genotipos del virus de la hepatitis C y el 1 es el más frecuente y más difícil de tratar: "La tasa de curación está entre el 40 y el 50 por ciento; sin embargo, para los genotipos 2 y 3 la curación supera el 80 por ciento". George ha recordado que el mayor conocimiento de la genética y de cómo funciona el sistema inmunitario ha ayudado a mejorar el manejo de la infección. "IL28B es el gen que se ha visto que está implicado en la respuesta inmune al interferón. Asiáticos y africanos tienen peor respuesta al tratamiento, porque presentan niveles más bajos de IL28B, mientras que europeos y americanos tienen niveles medios".
Con la mejora en el tratamiento de la hepatitis C se ha conseguido reducir el riesgo de cáncer hepático un 90 por ciento y en "esta evolución ha tenido que ver el aumento de respuesta en pacientes que no habían sido tratados".
George se ha referido a un estudio en fase II cuyos resultados se han publicado en The New England Journal of Medicine y que se efectuó con once pacientes con virus de la hepatitis C de genotipo 1 que no habían respondido a tratamientos previos con interferón alfa y ribavirina; esos pacientes fueron tratados con daclatasvir, el primer inhibidor del complejo de replicación NS5A, y asunaprevir, un inhibidor selectivo de la proteasa NS3. Ambos fármacos, desarrollados por Bristol-Myers Squibb, se encuentran en fase III de investigación. El estudio muestra que se consigue una respuesta virológica sostenida a las doce semanas de tratamiento. "A los tres o seis meses de terminarlo es necesario medir la carga viral para poder constatar la tasa de curación; si no hay virus en sangre, hemos conseguido controlar la enfermedad".

No hay comentarios:

Publicar un comentario